60. Una Oración para los presos

 


60. Una Oración para los presos 

Oh Dios, tú perdonas cuando merecemos castigo, y en tu ira recuerdas tu misericordia: Te pedimos humildemente, por tu bondad, que consueles a todos los prisioneros [y especialmente a los condenados a muerte]. Dales una comprensión correcta de sí mismos y de tus promesas, para que, confiando plenamente en tu misericordia, no depositen su confianza en nadie más que en ti. Alivia a los afligidos; libera al inocente; lleva al culpable al arrepentimiento; y como solo tú sacas luz de las tinieblas y bien del mal, concédeles que, por el poder de tu Espíritu Santo, sean liberados de las cadenas del pecado y traídos a una nueva vida; por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

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